LA RESISTENCIA NO SE ENCARCELA

Ante la llegada a Chile del Comandante Emilio para ser juzgado por los tribunales chilenos declaramos:

1.- Emilio forma parte de una generación de jóvenes que se jugó la vida enfrentando la peor dictadura de nuestra historia. Él, junto a decenas de miles de chilenas y chilenos, de todas las edades y orígenes, políticos, sociales y culturales, formó parte de una primera línea combativa que se enfrentó resueltamente y con todos los medios disponibles a su alcance, al fascismo que azotaba nuestra patria, logrando generar las condiciones políticas y militares para terminar con el flagelo de la bota criminal. Fueron las acciones de ajusticiamiento a los esbirros, entre las que se encuentra el ajusticiamiento del ideólogo del fascismo Jaime Guzmán, el intento de tiranicidio, las acciones de rescate de prisioneros políticos, los sabotajes, las acciones de autodefensa territorial, los enfrentamientos de pobladoras y pobladores con las fuerzas represivas y toda la lucha multifacética y multisectorial de la resistencia popular, las que permitieron mantener en alto la moral combativa del pueblo chileno frente al fascismo. Es bajo ese contexto histórico que sus acciones deben ser valoradas.

2.- El poder judicial, instrumento de los poderosos para castigar a los más desposeídos, ha sido históricamente cómplice de las injusticias y los crímenes de un modelo de dominación y represión que pretende aplastar la legítima rebeldía de un pueblo que se niega a ponerse de rodillas. Los jueces y fiscales, lacayos a sueldo del poder de los ricos, cómplices durante la dictadura fascista de los esbirros y criminales y cómplices hoy de esta dictadura neoliberal, no tienen la autoridad ética ni moral para juzgar a un combatiente de la resistencia antifascista. Esta legalidad burguesa y toda su institucionalidad capitalista y colonial solo tiene como destino ser barrida por la historia para dar paso a una sociedad mejor.

3.- Repudiamos la actitud servil de una izquierda institucionalizada y domesticada que acepta y se somete a la judicialización y castigo de la lucha popular. Es vergonzoso que, mientras en el pasado ensalzaban y rendían honores a las y los combatientes antifascistas, en tanto les servían como moneda de cambio para transar posiciones y cargos en la institucionalidad neoliberal, hoy sean cómplices de esta sociedad carcelaria, ya sea guardando ignominioso silencio o siendo parte de las leyes que criminalizan la resistencia y la protesta social.

4.- La única alternativa es seguir luchando sin descanso por la liberación inmediata y sin condiciones de todas y todos los prisioneros antifascistas, anticapitalistas, subversivas y subversivos, mapuche y de la Revuelta. El Comandante Emilio llega a las cárceles chilenas como un Preso Político de la lucha de todo un pueblo contra este sistema criminal.

¡Libertad inmediata e incondicional a Raúl Escobar Poblete!

¡Libertad inmediata e incondicional a todas las presas y presos por luchar!

Radio Plaza de la Dignidad

23 de septiembre de 2021